Ciruladores refrigerados o baños de enfriamiento, proporcionar efectivo control de baja temperatura para aplicaciones sensibles como la preservación enzimática, el almacenamiento farmacéutico y la estabilización de reacción. Con rangos de temperatura hasta -20 ° C o más bajos, ofrecen un rendimiento de enfriamiento rápido, características de seguridad integradas y compatibilidad con sistemas cerrados o abiertos. Ideal para procesos de laboratorio sensibles a la temperatura.