Un Baño de aceite es un dispositivo de laboratorio utilizado para calentar uniformemente una muestra a una temperatura alta, típicamente por encima del punto de ebullición del agua (100 ° C). A diferencia de los baños de agua que están limitados por el punto de ebullición del agua, los baños de aceite pueden funcionar a temperaturas más altas porque el aceite tiene un punto de ebullición más alto y propiedades térmicas más estables.
La elección del aceite depende del rango de temperatura requerido y la compatibilidad química con la muestra. Los aceites de uso común incluyen aceite de silicona, aceite mineral y aceite vegetal, cada uno con diferentes características de temperatura.
Se debe prestar especial atención al uso de aceite de alta temperatura para evitar quemaduras, fugas y posibles riesgos de incendio, ya que la temperatura es más alta que la de un baño de agua. Las medidas de seguridad apropiadas, como el uso de guantes resistentes al calor y trabajar en áreas bien ventiladas, son esenciales.